Extraño los dias rutinarios que tenia hace poco tiempo, 7 de la mañana en punto, mi despertador empezaba a sonar en mis sueños diciendome que tenia que partir a la escuela, con desayuno en la mesa y listo para estudiar comenzaba uno de mis dias colegiales. Llegaba a la escuela, y con una cara de felicidad me miraba el profesor de turno en la entrada y no me dejaba pasar si no tenia mis "patines", supuestamente inventados por el colegio para no ensuciar el piso de oro que tenia. Al entrar veia a los niños correr y a las profesoras gritando para que pueda empezar la "Formación mañanera", con el director presente y la supuesta subdirectora que en realidad era su hija, empezaban a dar el discurso de bienvenida al primer dia de clases. Todos los alumnos bien uniformados con nuevas caras y algunos satisfechos de sus largas vacaciones, empezaban a soportar, digo, a escuchar el "discurso de bienvenida". Luego, de 1 hora o 2 los alumnos empezaban a pasar a sus respectivas Jaulas, digo, Aulas en donde les esperaba el profesor a cargo para explicarles como van a ser las reglas y restricciones durante y fuera de la clase. Cada profesor colocaba sus reglas durante su clase, algunos eran permisivos, otros era realmente "respetadores" de las normas del colegio, un claro ejemplo: ¿Profesor, puedo ir al baño? , !NOO! !ESPERA A QUE TERMINE LA CLASE!, era reconfortante oir eso porque sabia que por cada pregunta que hacia, el odio crecia más hasta tener las agallas de retirarme del salon sin permiso. En fin, aquellos profesores que odié, ahora los estimo por ser "buenos" y "responsables", y espero verlos en un futuro MUY LEJANO!, en serio. Al termino de cada clase todos empezaban a hablar y contar lo que pasaron fuera del colegio, sus viajes, sus aventuras, en fin, todo lo que hacian menos estudiar, obviamente. Yo miraba a mi alrededor y burlaba silenciosamente de que tan tontos se veian haciendo lo mismo cada dia, pero a los 5 segundos empezaba a hacer lo mismo instintivamente. Cuando llega el recreo, todos salen despavoridos, como en uno de esos simulacros de sismos, casi siempre solia salir ultimo porque no veia nada divertido correr y ver a todos amontonarse en el famoso "kiosko" en donde atendia alegremente la señorita "Kathy". Al termino del recreo, lastimosamente teniamos que volver a formar, pero esta vez algo rápido, porque los profesores nos esperaban en nuestras aulas para atender a su clase supuestamente "preparada". Quedan pocos minutos para la "SALIDA", todos mirando al reloj avanzando cada vez más lento, así se aproximaba el segundo "simulacro de sismo" el mismo dia, todos recojian sus cosas del piso y de la mesa y corrian despavoridos nuevamente a hacer la "Cola" para salir al mundo real, mostrando las famosas "Agendas" firmadas por el profesor a cargo de la última hora de clase del dia. Si te olvidabas de hacer firmar tu agenda, simplemente tenias que buscarlo despavorido por tercera vez para que puedas salir. Todos afuera en grupos, conversando no sé de que, y algunos responsables, en camino a casa. Hacia lo que todo alumno "antiguo" hacia... formar el grupo afuera hasta las 3 de la tarde conversando de no sé que. Llegaba a mi casa y mi madre me esparaba ansiosa para preguntarme como me fue en el colegio y si conocí amigos nuevos. Con el plato de segundo en la mesa, me sentaba a conversar con mi querida y adorable mamá y mis hermanos menores. Asi como mi primer dia de clases eran los restantes del año.

Los cuales extraño y nunca más los volveré a ver.